Conciencia en sí, de sí al para sí HUMANITARIO.
Sandra Cantoral.
Se pueden mencionar algunos avances sobre la concepción de clase de sí al para sí,
en este tránsito y vía hacia el socialismo educativo que la propia lucha de
clases en México, está impulsando para una esperada educación de masas en la
dialéctica de la identidad del PODER POLÍTICO en esta época de vasos
comunicantes que parten del Homo Sapiens
al Homo Telecom con condiciones de
competencia e incompetencia empresarial monopolista financiera y tecnológica
que ha enloquecido con su productividad aberrante contra la existencia del
planeta y del ser humano; al respecto la pregunta es ¿cómo nivelar un escenario
competitivo asimétrico? Para hacer valer la participación equitativa política
digital, en una interconexión permanente de un reloj inteligente, tiempos,
internet, patines del diablo, móviles, tabletas, juegos, planchas, luz etc.,
unos medios digitales ya caducos otros no en esta era del Cuarto Poder de los mass media, que es la
comunicación/prensa, después de los otros tres poderes ejecutivo, legislativo y
judicial.
Otras tendencias de esta era en el siglo XXI, que se
vislumbran ya son, las fuentes de agua, automóviles, pozos, la inteligencia
digital, el gobierno digital, la votación y más. O como el software Mochila libre que podría entrar a las
escuelas en distintos idiomas y adaptarse a diversas lenguas para un ciudadano
activo, lo interesante sobre el método dialéctico aplicado a la educación es
valorar el grado de consciencia social e individual perfilados de estas
diversas épocas del conocimiento, aplicados de forma participativa para aportar
soluciones contextuadas en el apoyo hoy de las TIC (tecnologías
de información y comunicación). Lo cual requiere
de mucha imaginación, conocimiento, experiencia e intuición, por ello siga el
análisis acerca de la constitución de la consciencia/inconsciente humano.
Actualmente se sabe en ese tránsito de una conciencia
de sí, que gesta la posibilidad del saber de su existencia AUTOCONSCIENTE (Hegel, como primera luz de responsabilidad),
transitando en una consciencia de clase de sí al para sí (Otra consciencia amplia
histórica y social, Marx), es decir
información articulada al movimiento histórico-social dialéctico en
la lucha de clases, siendo conscientes de la injusta propiedad privada de
medios de producción acumulados y concentrados en unas cuantas manos de
privilegiados en las sociedades modernas de trasnacionales y monopolios
globales; tengo que aclarar este proceso educativo referido, para sostener el
argumento: existen 20 millones de desempleados en el mundo, y se sabe cómo para
el 2010 fue mayor la presión; en este sentido
TODAS y TODOS, como ACTORES
POLÍTICOS permanentes del proceso de historicidad social desde el Homo Sapiens al Homo Telecom de nuestra
actualidad -posibilidad de estar COMUNICADO en todo lugar-; este momento
amplio y global de mercancías, se encuentra quiérase o no, en el contexto real
de la lucha de clases de dimensión globalizada; porque el espíritu de esta
lucha desde sus gérmenes (ADN), está en las formas
de hablar, de comer, de concebir la vida, así como en el abuso de palabras y de
situaciones concretas del proceso de
explotación capitalista desde las entrañas de sus cimientos, que hoy
día está en caos y crisis de la humanidad en el planeta tierra. Véase la exposición de Marx, en ese tránsito de la conciencia de sí al para sí, que
rompió con el IDEALISMO puro para transitar en el proceso educativo al
materialismo histórico, como la forma científica de concepción teórica del
mundo:
“Los viejos hegelianos lo comprendían todo una vez que
lo reducían a una de las categorías lógicas de HEGEL. Los neohegelianos lo
criticaban todo sin más que deslizar por debajo de ello ideas religiosas o
declararlo como algo teológico. Los neohegelianos coincidían con los viejos
hegelianos en la fe, en el imperio de la religión, de los conceptos de lo
general, dentro del mundo existente. La
única diferencia era que los unos combatían como usurpación el poder que los
otros reconocían y aclamaban como legítimo”.
Lo que es importante dejar en claro, es que el tránsito de una conciencia en sí a otra
de si autoconciente en el sujeto educativo, es un proceso no sólo
histórico-político-dialógico (dialéctico crítico), que implica necesariamente
un cierto grado de desarrollo filosófico-político y, que también tiene un sentido evolutivo y
existencial que jamás se pierde en el sujeto; por ello se aprecia en este planteamiento, en la
constitución de clase, cómo se oscila de una conciencia de sí a otra
más elaborada históricamente de sí autonciente, ello no implica que quede
anulada en los tránsitos la sensibilidad más fina de la conciencia en sí meramente existencial, sino que se acuñan en la
madurez del sujeto proletario (clase trabajadora en general para sí) con un espíritu
revolucionario en la PERTENENCIA de clase social humanitaria que se vive en
pleno desarrollo hoy en día, para construir en la educación de masas una forma
más legítima con una virtud política dialógica de los derechos humanos
integrales cada vez más elaborada bajo leyes democráticas/comunitarias.
Dado que la era
del movimiento social, es algo nuevo y
sorprendente en el comportamiento de la totalidad política concreta en el
sujeto del mundo con el uso de
las TIC hoy en día, es decir en el propio sujeto histórico-educativo tan simple
y a la vez tan complejo que hoy vislumbramos como dos polos entre la
prehistoria y la era de la robótica, envuelto en sus propias contradicciones de
comunicación/incomunicación, ya sea solucionándolas y a la vez creando otras
diferentes en un proceso educativo REAL, SIMBÓLICO e IMAGINARIO del ser
humanitario mundial, que se entrelazan entre sí; existiendo predominancias de
estos tres momentos en el pensamiento/actuante del sujeto, de acuerdo a su
formación de valores de sensibilidadracional
humanitaria, en donde no puede existir razón sin sensibilidad, ni ser sensible
sin razones reconocidas internacionalmente en el contexto de la explotación
capitalista-neoliberal actual; ese es el punto donde el dinero y el capital dan PODER de emancipación o plenamente de
opresión, por lo que el uso de él puede envilecer y degradar, es como estar en
el frágil hilo que apenas distingue, la locura y la cordura, es decir, en el
movimiento del ARTE educativo de nuestra política humanitaria, para la
toma de decisiones buenas, malas o peores.
Por tanto, es
al sintetizarse históricamente la existencia del ser humano, que el
tránsito de la conciencia, tiene que ver con el RECONOCIMIENTO y con la
PARTICIPACIÓN CONSTITUTIVA de la ORGANIZACIÓN PRECISA Y DEFINIDA de la propia
lucha de clases con PRINCIPIOS de honestidad y de lucha por la libertad y la
justicia comunitaria en la organización y la división del trabajo, es
decir, desde la sobrevivencia individualcolectiva más significativa en
los procesos educativos de humanización en el reconocimiento de la
productividad, los valores que lo rigen y las tradiciones y costumbres ahí
acuñadas (Gramsci); en esa relación de
sobrevivencia se va dando cuenta el sujeto histórico, de la resolución de sus
propias contradicciones políticas (derechos humanos esenciales desde la
infancia y desde que se tiene la capacidad de la palabra dialógica en evolución
cultivada), que le dan movimiento, cambio, contradicción, transformación,
desarrollo, superación, diferencia y unidad -mirada DIALÉCTICA CRÍTICA en la
construcción de autonomía responsable-.
De dichas
contradicciones entre la vida - amor revolucionario, a la construcción de -muerte/vida-amor
revolucionario-muerte; se van desarrollando tránsitos que devienen de los
hechos generales y particulares en el horizonte de valores ahí desplegados y
asumidos en la condición de tal existencia socio-cultural cada vez más
humanizada, es decir, en la calidad de valores y de virtudes, que la Pedagogía
Crítica enarbola con una interpretación histórica-dialéctica de raíz
filosófico/política, es decir, entendido no como un devenir lineal ni mecánica
o funcional sino profundamente reflexivo sobre la pregunta que interroga por el
ser -Heidegger-; igual la cultura proletaria nos presenta el hecho histórico de
la explotación del hombre por el hombre, que parece invisible, pero no lo es; porque el tránsito del movimiento
DINERO-MERCANCÍA-DINERO transitando a MERCANCÍA, DINERO, KAPITAL ACUMULADO,
deviene objetivamente de la ganancia acumulada y no pagada al trabajador
directo -plusvalía- en el proceso de explotación capitalista moderno, lo cual
significa un abuso de poder político, dado que la clase trabajadora de
las diversas épocas, aparece borrada cual
si fuera un acto de la IMAGINACIÓN INFANTIL cual si fuese un proceso meramente evolutivo de la humanidad, olvidando
explicar de forma integral esa explotación histórico-social padecida
injustamente para el beneficio rapaz de unos cuantos explotadores. Es de
sentido común la explicación, plantean científicamente Marx/Lenin: “Si el trabajo es social la propiedad de
medios de producción no puede seguir siendo individual/monopolista, sino que
humanamente tendría que ser social”. Tan claro como el principio de
Emiliano Zapata: “La tierra es de quien la trabaja”, sabiendo que el principal
medio de producción en este planeta es la tierra, y de ahí se amplía el
concepto humanitario, a la fábrica, la maquila, el agua, el petróleo, la salud,
etc. etc.
De acuerdo a
dicho comportamiento en valores humanos, con las condiciones materiales de vida
desarrolladas por el TRABAJADOR (A) direct@s, que han humanizado la capacidad
de comunicación y de expresión libre, consciente y voluntaria, se van creando
las CONDICIONES MATERIALES Y SUBJETIVAS de sensibilidadracional en lo colectivo y en lo
individual para el planeta tierra, entendida ésta como espacio educativo, con un sentido de historicidad social, es
decir, en el trabajo realizado y reconocido en dicho proceso educativo en la
historia de la humanidad desde el tránsito del homo sapiens al homo telecom;
porque el trabajo productivo vivido
desde los años de infancia, es el que genera verdaderamente la riqueza y el capital
-aunque aún hoy no sea reconocido-; pero al no ser valorado este trabajador
directo, se le desdeña a través de la ideología IDEALISTA de la clase dominante como un acto de PERVERSIÓN y de
ABUSO DE PODER POLÍTICO, reduciéndol@ a su mínima expresión que es la
mercancía, como objeto de “uso y de desecho intercambiable en la acumulación y
centralización de capital”, de hecho el cuerpo humano aparece como una
mercancía más en el proceso educativo de producción/distribución/consumo,
principalmente en torno a las mujeres, los pobres y los indígenas, sometidxs
por el SISTEMA MACHISTA neoliberal, que acumula toda la historia de
sojuzgamiento a lo largo de la historicidad humana. Por tanto el dinero
es la mercancía más preciada para el capitalismo salvaje.
Tal horizonte de valores de explotación injusta,
se expresa en los actos más simples y complejos del sujeto histórico educativo
en el contexto de la lucha de clases, así el sujeto va madurando de una conciencia de sí naturalizada -ensimismada y
egoísta- a otra para sí -revolucionaria humanizada-, para así servir a su clase social de
procedencia proletaria-trabajadora con pago o sin éste; de acuerdo al grado
de consciencia social desarrollado y/o
asumido, por medio de un largo PROCESO POLÍTICO EDUCATIVO en sí, de sí al para sí, hoy día en la lucha de HUMANIZARSE
globalmente en equidad amorosamente justa con armonía y equilibrio realmente
democrático; valoramos cómo en la dialecticidad de esta lucha, de
transformación de ACTITUDES y COMPORTAMIENTOS se va potenciando y propiciando un devenir filosófico-político
formativo en la defensa de los derechos humanos con UNIDAD de consciencias críticas/reflexivas
integrales, capaces de organizarse para saber gobernarse con autonomía
responsable, como síntesis de la existencia humana consciente, lo cual debe
superarse en la experiencia espontaneísta/idealista que ha labrado la burguesía
en su anarquía FINANCIERA, de arrebato, robo, corrupción y competencia desigual
sin fin en los procesos de explotación del hombre por el hombre, en sentido
genérico.
Por tal razón
dicho proceso se compone en la conscienciación
o conscientización para sí del sujeto, por los conocimientos, experiencias,
imaginación e intuiciones que le dan certeza de la vida/amor revolucionario/muerte/vida/amor
revolucionario, dialécticamente expresadas en su esencia humana; dicha certeza de sentidos sin garantía,
se va constituyendo en la historicidad recorrida en cada consciencia individualcolectiva (Cantón), de acuerdo
con las responsabilidades compartidas,
con base en una franca y recta
comunicación como clase proletaria,
asumida en la correlacion de fuerzas, que no son frases revolucionarias en
bonitas consignas, sino acción teórica concreta en la lucha de clases presente,
pasada y porvenir. La
formación de este proceso tiene que perfilar un método de análisis con una
propuesta dialógica/dialéctica, posible de realizarse para transitar de una conciencia de sí a otra para sí a través de las
TIC, con carácter humanitario:
Crear las condiciones subjetivas
(imaginación sensible) y objetivas (producción) en la educación de masas en
contra de la lógica capitalista de explotación:
•
Proyectos educativos
Ético-revolucionarios: de
movilización y de trasgresión del Estado de derecho capitalista, al
saber reconocer las normas culturales y las posibilidades de crítica
abierta, con base en la raíz cultural, constituida en consciencia para sí, como clase proletaria. Principios y
valores de potenciación y de
responsabilidad ante la toma de decisiones libremente asumidas en ejemplos
virtuosos en un Frente Único de lucha en la huelga política nacional/internacional,
que es necesario construir en la lucha de clases, y que están presentes en
las consignas sociales. En
la diversidad de situaciones concretas político educativas: procesos de autorreconocimiento
del trabajo individualcolectivo
(Cantón) de sensibilidadracional en la totalidad política concreta, que es en sí y para sí,
inescindible, pues es el propio sujeto educativo en su capacidad de lucha,
en las relaciones sociales de producción.
•
TODA ACCIÓN
ES NEGADORA…
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|
En dicho proceso
de comunicación dialógica y de síntesis histórica de la teoría activa,
puede haber por supuesto MALOS ENTENDIDOS dentro de la misma clase social trabajadora,
debido a las FORMAS ejercidas en las RELACIONES DE ABUSO DE PODER POLÍTICO que
arrastran a los comportamientos que oscilan entre la fortaleza, la prudencia,
la templanza y la justicia, a saber, valores universales, inmersos en la ambigüedad
de la DISCIPLINA inquisidora, y en la ley de todas las épocas por medio del
aparato de Estado y sus dispositivos de PODER POLÍTICO hegemónicos para
apoderarse como única meta, de la propiedad privada de medios de producción; los
cuales hasta hoy están registrados por la Teoría Pedagógica Multicultural con
dicho sentido de la lucha de clases, pero también a lo largo de las más sorprendentes civilizaciones y
expresiones de los matices culturales entre el comportamiento burgués y el
comportamiento proletario, es decir, entre poseedores y desposeídos, que fueron
creciendo en las formas y en el tacto, para educar-educándose desde la
anarquía espontaneísta del ensaño y del error de la conciencia en sí, simple e
infantil, la cual debe ser re-educada con un sentido de clase significativo en
matices diferenciados, para sí transgresora y revolucionaria, es decir, en
su identidad de pertenencia proletaria históricamente.
De esta conciencia
en sí simple o infantil, se cultiva el comportamiento de temple bien
equilibrado en la correlación de fuerzas que da cuenta de una consciencia para sí NOSOTRICA -como lo dice
Lenkersdorf en su filosofía tojolabal-; consciencia del nosotros, que actúa permanentemente en los matices que reproduce el sujeto educativo en el proceso de aprehendizaje de la
propia hegemonía de sometimiento; la
cual está inconsciente en el mandato y
en la imposición, que conllevan situaciones complejas de la jerarquía del poder
político, acuñada y subsumida históricamente en la
constitución de esa conciencia del sujeto histórico-educativo, como hábitos de comportamiento naturalizado,
que se expresan en las formas de vida
educativas, la mayoría de las veces contradictorias a través de las épocas
acerca de tal historicidad humana y, que se acuña en el propio entendimiento del proletariado.
En una palabra, a la clase proletaria, se le ha arrebatado por la hegemonía educativa
enajenante y alienada a través de la cosificación del sujeto, toda
forma de defender sus derechos humanos más elementales, con base en
una concepción histórica-política del mundo
real, imaginario y simbólico, es decir, con una mirada dialéctica crítica (Hegel/Marx), como se puede valorar en el
siguiente gráfico, dado que no todo lo que se enseña se aprehende, pero en
cambio, todo lo que se aprehende se enseñó necesariamente con el ejemplo a
través del PODER POLÍTICO hegemónico en el sistema salvaje de explotación, en
el contexto de la lucha histórica entre las clases o entre lxs poseedores y
desposeídos:
Así valoramos el tema de la constitución de una conciencia
en sí, de sí al para sí individualcolectiva
(Cantón) de sensibilidadracional (Cantoral),
hasta ubicar una consciencia de clase revolucionaria cada vez más humanitaria;
para ello ocuparé un ejemplo concreto de
la lucha de clases del contexto político nacional vivido desde el sindicalismo
de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), que da cuenta de lo que hoy es
esta institución educativa, con la intención de valorar sus dificultades,
contradicciones y la superación en su madurez, entendida ésta como síntesis del
propio sujeto educativo en lo personal, individual, grupo social, Estado-nación,
pueblo o gobierno en su diversidad y matices socioculturales; ello lo expreso
así, de acuerdo al grado de consciencia
social desarrollado por el sujeto histórico en su propio contexto de
historicidad social, como se ha venido explicando y hasta aquí expuesto; es
decir, para hacer propio el concepto, como una posibilidad de reflexión, desde
una postura de la Pedagogía Dialéctica Crítica Multidisciplinaria, que permita
encontrar los matices de la constitución de la consciencia en la explicación
del propio ejemplo; entiéndase, en sus relaciones de PODER POLÍTICO y su propia
dialecticidad histórica en esta lucha de clases; de manera que el sujeto sea
capaz de organizarse para construir un partido proletario en México, y quizá
luego global -Propuesta de Engels y Rosa Luxemburgo-, que abarque al sujeto en sí, de sí y para sí, como una
necesidad de análisis y de re-significación en el contexto educativo
HUMANITARIO ya explicado; incluyendo a la educación sindical.
Se intenta comprender los matices que se dimensionan
en la condición de clase del proceso de discursos perversos de una conciencia en
sí, a una conciencia de sí,
hasta madurar en otra consciencia más elevada, que es la consciencia para sí como un proceso
dialéctico crítico (Covarrubias Villa) que tiene que ver con la FORMACIÓN
POLÍTICO-PEDAGÓGICA militante, hoy día
podemos valorarlo con los intentos de golpe de Estado de Trump y su séquito al
pueblo de Venezuela con Maduro, su perversidad se desmorona a cada paso como
fue el 23 de febrero de 2019; con base en este ejemplo se muestra una de
tantas luchas reivindicativas y revolucionarias en germen, de procesos formativos, que se
pueden aprehender por medio del ejemplo, asumiendo una tarea académica-política-humanista
y sindical; reinterpretándola en ese espacio de totalidad
política inescindible neoliberal, aquí vivida, según testimonios objetivos, de
acuerdo a los actores políticos concretos.
Véase para ello
en este ejemplo, la crisis institucional que se potenciará en el presente siglo
XXI, como se deja ver en la política del llamado Estado de derecho en México,
justo en el tránsito entre el desarrollo del Capitalismo y un Estado socialista
internacional de transición; esto depende de la capacidad de organización
política, que la propia clase
trabajadora sea capaz de construir, como FORMA DE VIDA SUPERIOR, no entendida
ésta como jerarquía de ABUSO DE PODER POLÍTICO hegemónico burgués, ni como la
guía parlamentaria del caudillo o el
‘modelo’ a seguir, sino justo por lo contrario, ejerciendo un poder
político humanizado, valorando la tipología
única e irrepetible que somos los seres humanos, en la búsqueda permanente
de la calidad cultural de los pueblos en
una construcción cotidiana, reconociendo en principio, su raíz
histórico-cultural indígena que tiene un fuerte sentido de consciencia para sí proletaria/Nosótrica en los hechos de unidad en
germen, por lo que sólo falta un detonante que los active en la lucha
revolucionaria generalizada.
Es necesario decir entonces, en esta explicación que,
la educación en el sistema capitalista de explotación, ha arrebatado históricamente la capacidad de
ANÁLISIS POLÍTICO PEDAGÓGICO CRÍTICO, aún en las UNIVERSIDADES PÚBLICAS,
GRATUITAS, POPULARES Y CIENTÍFICAS, en donde la hegemonía del poder político burgués
somete al sujeto educativo en formas diferenciadas, porque la hegemonía
lo frena, por medio de programas de estudio empresariales, como es la ACE en el
caso de la UPN que fue tomado como ejemplo, a permanecer en una consciencia en sí y de sí, en la simple
existencia fundada en el miedo y en el individualismo, nada más, en las relaciones de poder político de la propia
clase trabajadora, la cual aún no está organizada políticamente en este
sentido, y de forma generalizada como consciencia para sí en este momento del
proceso, sino con una intención
pre-revolucionaria en la educación de masas, asumida en las filas del
proletariado, lo cual resulta natural en la lógica del sistema, el cual
está en crisis y sin porvenir humanitario, pensándolo no en el todo o nada,
sino en lo posible de nuestras generaciones. En este sentido podemos ver a los
académicos/mercancía vendiendo su trabajo como obreros en la fábrica, de
semejante forma a los administrativos en una burocracia naturalizada y muchas
veces indiferente en la época de la robótica sin saber su uso humanitario en
plenitud; de igual forma el estudiantado, muchos de ellos y ellas como
trabajadores contratados en los emporios monopolistas, en las maquiladoras o,
en el trabajo informal entre otros más.
En este sentido “Marx resalta, a saber, que la única
clase revolucionaria de la sociedad es el proletariado; que la lucha del
proletariado está ligada a la revolución social; que la revolución social
necesita la dirección del partido proletario que lleve al socialismo. <…>
Que
la participación de la clase obrera debe ser obra de los mismos trabajadores;
que la lucha por la emancipación de la clase obrera, no es una lucha por los
privilegios y monopolios de clase sino por el establecimiento de derechos y deberes
iguales y para la abolición de todo dominio de clase…”.
Lo que pretendo
en este ensayo educativo, en cuanto a una Pedagogía del Poder Político y Lucha
de Clases que se presenta multidisciplinaria, es incidir en el ejercicio del
PODER POLÍTICO de nuestros derechos humanos en construcción para pasar a otra consciencia para sí revolucionaria del
movimiento de masas de forma comprometida en el planeta tierra y en las
comunidades más pequeñas también, es decir, en la presente acumulación de fuerzas reales nacionales e
internacionales, hasta alcanzar a construir la huelga política general con un
tono de UNIDAD COMUNICATICA -TIC- del proceso educativo de este proletariado en
largos trances de humanización integrales; lo cual es una tarea pedagógica pausada
y prudente, que debe ser atendida cotidianamente, no sólo por la izquierda más
consciente en la lucha de clases, sino con un carácter de humanización para
ejercer dicho PODER POLÍTICO en conjunción y unidad de esfuerzos, para no seguir en la simbología burguesa
hegemónica, colocada la clase productora de la riqueza mundial proletaria, en estado de completa indefensión frente al sistema de explotación
capitalista.
Puede valorarse cómo
el sentido del concepto de izquierda oscila en ese bagaje de
constitución de consciencia del sujeto histórico, así se pasa de una conciencia en sí, simple e infantil, a otra conciencia más elaborada de sí como
grupo de amigos, o incluso en la forma
corporativa del sindicalismo charro; o definitivamente se asume como clase
trabajadora/prole en lo general; pero
también hay quienes se forman políticamente para el trabajo militante de
transformación radical para PODER cambiar políticamente el orden de
explotación; que en las apariencias de estas izquierdas sigue dándose sin trastocar las fronteras de la
inconformidad y la protesta:
“…sin duda tal
necesidad nos llevará a resolverlo, por ejemplo, al plantearnos el proceso a
seguir: a) nos planteamos un tipo de
unidad y alianzas que pone en el centro la lucha de clases más que la identidad
izquierdista; b) la identidad frente
a un enemigo común; c) un programa
democrático-revolucionario, proletario y popular; d) unas formas y métodos de lucha, y; e) el empleo de las contradicciones capitalistas por encima de las
cortapisas izquierdistas, sustentándose en las tareas urgentes del movimiento.
Ahí veremos que las izquierdas se asociarán y disociarán según intereses,
prioridades o perspectivas, en cambio el proceso revolucionario podrá estar
seguro de su continuidad, las posibilidades de avanzar la unidad no sólo con
quienes se denominan izquierdistas, sino con nuevos sectores interesados de
primera instancia en participar activamente en las luchas sociales, será mucho
más abierta, flexible y dinámica permitiendo afirmar un trabajo revolucionario
en sus filas, y especialmente asegurando que los pueblos movilizados afronten
las tareas de su programa estratégico <…> … esos caminos se construyen…
en general, se ponen grandes esfuerzos o no se es unitario, así, a nivel:
sindical, campesino, estudiantil, indígena, en todos lados la necesidad obliga
a concentrarnos en esa labor, a trazarnos tareas por encima de los viejos
prejuicios de la actitud nacional, del sectarismo”.
En este sentido aún no se puede desarrollar una
etapa pre-revolucionaria en contra de la propiedad privada de medios de
producción y del imperialismo monopolista en términos internacionales, sin
embargo, en el poder político que se desarrolla
en la presente acumulación de fuerzas
de la lucha de clases entre el capital y el trabajo como un proceso de
clase encarnado en la figura “patronal” hegemónica, éste se muestra como algo
natural en los programas de estudio de la UPN en el ejemplo que venimos
siguiendo; en la dimensión más amplia histórica valoramos cómo existen fuerzas
fascistas del denominado Yunque, que es
la esfera de la ultraderecha mexicana, son
familias empoderadas en los hilos de la economía política desde la etapa pre-revolucionaria de 1910, a
saber con Porfirio Díaz, Carranza, Madero,
Plutarco Elías Calles y
Obregón, como cabezas del Estado Capitalista Mexicano -según plantea
Álvaro Delgado-. Y hoy en día es en México aún más terrible la política
neoliberal de privatización y degradación social intencionada por la hegemonía del imperio neoliberal, por ello se
tiene que ser agudo para activar todas las luchas posibles, que den sentido no
sólo de cohesión sino de bienestar generalizado para la población, empezando
por la más desprotegida: mujeres, pobres e indígenas y obvio en la defensa de
nuestra América Latina Bolivariana.
Así se ha satanizado,
con esa ideología religiosa de una conciencia
en sí, la HEGEMONÍA BURGUESA en la defensa de sus intereses clasistas de
pertenencia; de manera que el materialismo histórico dialéctico crítico, no
sólo como forma de razonamiento o método fue siendo apabullado, sino que
también y sobre todo como arma de lucha revolucionaria de la clase trabajadora
con educación política ha sido negada -lo podemos valorar con Bolsonaro hoy en
Brasil-, hasta lograr que la propia clase proletaria se mofe de este
instrumento revolucionario, porque como se sabe
tampoco se ha potenciado como forma de desarrollo práctico, es decir como
método de estudio o de razonamiento dialéctico crítico; en este contexto
histórico amplio, la teoría leninista, precisa
que para LOGRAR, que sea el PUEBLO ORGANIZADO políticamente, quien haga valer
sus intereses y necesidades de clase en la lucha política de la clase prole, tendremos
que ir exigiendo PODER abrir la polémica dialógica en la familia, en la
escuela, en la iglesia y obvio en los medios de comunicación de masas -el cuarto poder-, para conocer nuestras
razones de clase en muchos escenarios
posibles revolucionarios nacionales e internacionales.
En Rusia lo intentaron en la revolución de octubre de
1917, con proyectos quinquenales estratégicos para potenciar sus capacidades y
satisfacer sus necesidades humanas básicas; ahora esto sería por medio del
arte, la tecnología, la cibernética, a
través de la teoría científica, y demás medios revolucionarios posibles como
las TIC o la robótica; se conoce también que lo han logrado enfrentando sus
propias rítmicas y cadencias histórico-políticas de comunicación, que son
contradictorias en este mundo real
concreto que se matiza desde una conciencia en sí, de sí a otra más compleja
y abarcativa que las dos anteriores,
pues ésta las comprende, que es la consciencia para sí de clase proletaria/con
la PROLE desarrapada -Freire-, asumida en la praxis revolucionaria
HUMANITARIA en este siglo XXI; en esa correlación de su particular
historicidad social con la actual cuarta
revolución industrial y tecnológica basada en la robótica, la inteligencia
artificial, las impresoras 3D y el big data.
De modo que en
el espíritu emancipador de los símbolos mítico-fantasiosos de la cultura
burguesa, que va decayendo en proletaria -pequeña burguesía (pobres que se
sienten ricos)-, se ve cómo por medio del humanismo más organizado
políticamente por el proletariado trabajador, se impulsó un cambio profundo,
que propone para sí, la superación del régimen de explotación
capitalista, para PODER crear las condiciones político-educativas en la
toma del poder político integral con lazos de hermandad y no de destrucción,
para instaurar un Estado socialista desde sus formas más simples, con base en
la construcción de Nuevas Constituciones Nacionales, que se perfilen para este
siglo, en el contexto internacional y latinoamericano, porque el capitalismo ya
está en franca decadencia con su política neoliberal en crisis, deambulando
entre las reformas progresistas y las
privatizadoras, todo un dilema pedagógico-político en esta lucha de clases del
siglo XXI.
El socialismo en construcción es un ejemplo histórico
que es necesario resignificar pedagógicamente por su raíz humanista, entiéndase,
en su justa valía histórico-dialéctica crítica, de acuerdo a las condiciones
materiales y socioculturales políticas generalizándose, sabiendo hoy de toda la complejidad particular hegemónica que
implica esta nueva relación humana rodeada de contradicciones, cambios y
movimiento de odio y violencia, que
tendrá que enfrentar el acto político de la toma del poder por parte del pueblo
trabajador, el cual se asume todos los días como devenir de historicidad social,
es decir por ser un proceso revolucionario educativo en su construcción
programática particular y general como algo implícito
pero no explícito y consciente políticamente aún, porque hoy día está en el
contexto de la lucha de clases y en la dialéctica histórico materialista de las
relaciones de poder político, en ese devenir de la lucha y educación de masas,
como una gran necesidad humanista del campo de la Pedagogía Crítica
Multidisciplinaria, implícita en la construcción social metódica del
conocimiento humano.
Porque es necesario, que se sepa avanzar con los
obreros, los campesinos y los sectores populares constituyéndose en procesos y
programas educativos urbano populares, en donde se recuperen los avances
tecnológicos, científicos, de medios cibernéticos, informáticos, de robótica y demás, que
pertenecen al bienestar COMUNICATIVO DE
MASAS -TIC- para el pueblo trabajador, pero la hegemonía y crisis del capital
se los niega; porque hoy están éstos privatizados en México como un gran monopolio
con Carlos Slim, pero son MEDIOS DE
PRODUCCIÓN que deben ponerse como
herramientas al servicio de los pueblos organizados y no organizados
políticamente, para el estudio
teórico-político activo, tanto nacional, local como internacional por venir en
las huelgas generalizadas; entendido como un todo en las interdependencias del
capital imperialista, y así contribuir
en la organización política frentista,
unitaria, democrática, asambleísta y revolucionaria de la lucha de clases, para
lo que se necesita, de la educación política en la asunción de una
consciencia para sí revolucionaria
con base en la problematización permanente de la Pedagogía Crítica Humanista
con preocupación filosófica-política
proletaria, en la asunción de clase con la paz y defensa de nuestros derechos
humanos.
La clase trabajadora
proletaria en México es joven aún, en cualquier sector; su condición
proletaria se mide por el grado de consciencia de clase asumida, que la define.
En la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) ha privado la lucha democrática del
sindicato y ha estado presente éste en el movimiento social, por sus
aspiraciones y en la conjunción de sus luchas. En la historia del sindicalismo
mexicano, en los años de 1929-34 se multiplicaron los sindicatos de empresa, y
en 1935 despunta el nacionalismo democrático y el marxismo leninismo; y es de
1948 a 1950 con la derrota de los mineros de Rosita y Cloete que se extendió el
dominio del charrismo sindical. [La UPN hoy tiene que cuidar en la presente
crisis de la política neoliberal capitalista, el espacio sindical democrático,
como el arma de lucha del proletariado académico y de servicios; es decir, para
todos los hijos del pueblo]. Vid. Maldonado,
Edelmiro. Breve historia del movimiento
obrero. Ed. Biblioteca Sindical, México 2009. P. 2.
