Monday, August 23, 2010

Organización política y sus implicaciones


“Proletarios de todos los pueblos uníos”

Manifiesto del Partido Comunista
Karl Marx

Se reflexiona en el proceso educativo del hacerse humano, por medio de la historicidad, tomando en cuenta la relación política, la sensibilidad de clase, y la expresión humana liberada.

La organización política es el fundamento para la valoración de los derechos humanos universales y particulares, véase su significado filosófico formal, que tiene una multiplicidad de lenguajes e interpretaciones posibles, en tantas explicaciones, conjeturas y refutaciones como sujetos históricos existen.

En la relación política, Aristóteles (384-322 a.c.), recuperando a Sócrates, refiere la Filosofía práctica, junto con la ética y la economía; dado que la verdadera política dice Platón (425-347 ó 348 a.c.) se centra en la tarea humana de toda la vida por medio del diálogo -recuperada esa propuesta de la mayéutica, observada en la ética socrática de conocerse a sí mismo (470-399 a.c.)- así se va mostrando a los jóvenes la capacidad dialéctica del poder real, el dialogar, saber escucharse y acordar una solución posible de entendimiento humanizándose así en la resolución de problemas comunes por el bien de la mayoría, en la resistencia y la autodefensa contra la minoría del empresariato monopolista que se privilegia con "su" ley autoritaria moderna.

Con base en este significado, Marx ve científicamente el interés por el trabajo crítico de la economía política en la denuncia de la lógica injusta de la acumulación capitalista; al igual que lo captó la reflexión práctica de Paulo Freire en la dialogicidad de la conscienciación crítica pedagógica en contra de la formación bancaria, pues él luchó por una educación política para América Latina y otras latitudes de pueblos en condición de pobreza como la India; para comprender la dialéctica entre los oprimidos y opresores, que se encuentra en permanente intersubjetividad del comportamiento socio-cultural; por esta relación política se tiene la necesidad educativa de seguir aportando al proceso de emancipación histórica, el cual es infinito.

La relación política significa por tanto, la capacidad dialógica de la liberación humana en la síntesis de Platón, así se puede resignificar con mayor precisión el fetiche ‘como motor del progreso humano’ en otro proceso protector de los intereses del capital, ya desvirtuado principalmente la verdadera lógica política, fundada en procesos humanos de emancipación y libertad de expresión; desvirtuándose en la lógica capitalista, como ente exclusivo de la vida parlamentaria socialdemócrata actual, que también tiene su propia historicidad; en este sentido, revelando la falsedad ideológica neo-liberal menciona Jeannette Escalera, en ese misterio de la obscuridad de la caverna de Platón, la cual pasa por la dimensión sincrética de la identidad del sujeto educativo, por medio del ejemplo vital naturalizado como por sombras, en la práctica hegemónica educativa del agandalle violento, machista y patriarcal; que deja la representación del arrebato de ira, incomprensión, sordidez e injusticia, que deviene en sí del instinto salvaje animal, reconstituyendo permanentemente al sujeto educativo en su proceso de conocimiento y conscienciación histórica, que mueve y fundamenta su relación política de clase, con una cosmovisión del mundo y de la vida diferente como pueblo trabajador despojado.

De ahí devienen los disvalores en contra de la vida, en el afán por la muerte rápida e instantánea del otro que en apariencia ‘no soy yo’; pues se cree como parte del engaño ideológico hegemónico, que el sujeto dominante tiene como ‘don divino’ un gran poderío de acumulación capitalista, que lo coloca de forma natural por encima de todos, en la relación entre poseedores y desposeídos; dueños de todo lo trabajado por los oprimidos a lo largo de la historia humana, logrado este sentimiento por medio de la práctica evangelizadora del miedo, la culpa y el castigo, que fue siendo inclulcado hasta hoy día en la hegemonía política implicándose emociones básicas, que oscilan entre la euforia, el miedo, la agresión, la tristeza, la repulsión, la melancolía, la confianza, el liderazgo, la resignación y el conocimiento o sabiduría.

Esta práctica de abuso de poder político en la acumulación y centralización capitalista vivida hasta hoy en múltiples matices de las emociones del sujeto educativo, se presenta ideológicamente como el mundo político en el acto pragmático del imperialismo mundial, que olvida la sabia cosmovisión indígena, que aún enorgullece a la patria mexicana, en el colorido cultural de los pueblos de Oaxaca, Veracruz, Puebla, Guerrero, Chiapas, Yucatán, entre otros más como en San Salvador Atenco, Estado de México, que conocen el sentido de la dignidad que empieza por la vida, que es la tierra; a estas culturas la oligarquía financiera les tiene miedo por eso redobla esfuerzos para despojarlas de lo que es suyo, su esfuerzo en el trabajo conjunto, porque han aprehendido a vencer el miedo en algunas regiones de identidades locales, étnicas, culturales y territoriales -como plantea Tejeda-.

De esta confusión del “sistema democrático” en las relaciones políticas, se aprecia hoy la debilidad presidencial, y la necesidad de la federación de los sindicatos y de los grupos políticos, que se sustentan en prácticas de abuso de poder hegemónico, así muchos sujetos en lo individual y en la hegemonía se van curtiendo en estas prácticas corruptas y degradantes; aquí preguntamos ¿qué cambiará en la geopolítica de Centroamérica y en la antigua Mesoamérica con el proyecto Plan Puebla Panamá empresarial que no logra su neoconquista contra estas culturas para degradar su vida?

La pregunta inicia apenas a resolverse en el contexto de la producción maquiladora que necesita desarrollar el Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN) en donde queda claro el tipo de educación a imponerse en la región, como sujeto cosificado, así puede comprenderse el origen filosófico de la relación política del sujeto educativo en el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Telefonistas y de la Industria Eléctrica, pues en un proceso lento se nota la autonomización de liderazgos, con una aparente disputa y tensión en la división o muerte de nuevos líderes, en donde la práctica dialógica es desigual y desvirtuada en el contexto hegemónico del capital en relaciones de poder político y de abuso de éste.

Este panorama de rupturas de hegemonía política, en donde los gobernadores estatales aplican el poder que siempre tuvieron con la descentralización y federalización, para negociar con los empresarios del capital en los modelos maquiladores que se perfilan en Tamaulipas, Chihuaha y Baja California con la fuerza globalizadora del capital, ello necesariamente conlleva a dimensionar los derechos humanos en su esquema jerárquico entre regiones, municipios, pueblos y naciones de la vida cultural latinoamericana.

En este sentido Tejeda aclara sobre la identidad occidental que “La presencia duradera de las tradiciones prehispánicas o precoloniales, que en varios países configuran la base de la identidad nacional. La ambigüedad del ser latinoamericano que nos hace copiar e imitar, a la vez que nos queremos alejar de un pasado que nos marca para siempre. La parte indígena de la vida nacional se ha puesto en marcha y ha dejado de estar escondida y negada. El auge de las identidades, conduce a movimientos autonómicos, y las réplicas de proyectos separatistas y segregacionistas. Los Estados nacionales se ven sacudidos por los efectos de la globalización, mientras desde abajo surgen reclamos autonómicos, que requieren respuestas integradoras desde la perspectiva nacional y regional. La identidad latinoamericana se pone en discusión como parte de los diversos niveles y ámbitos en que los individuos, o las colectividades y las naciones conforman identidades y diferencias” .

Las diferencias de esta depresión y tristeza compartida por los oprimidos y despojados de los bienes de su trabajo, como proceso educativo histórico, se está acumulando también en indignación y luchas de resistencia y autodefensa, ya que desde la lógica más simple, se comprende que han sido siglos de contemplar y de callar su razón histórica, que sale ahora del corazón y del cuerpo mutilado del sujeto educativo, en la era del conocimiento significativo que ha acuñado el ser humanizado en la sensibilidad política, que empieza a hablar su mundo, para su mundo y con su mundo.

Se requiere de la palabra que supere la crueldad del poder estatal, sea éste esclavista, feudal, capitalista o aún su propia sombra, que es hoy el estado socialista entre los matices de la esfera multinacional imperialista, por ser la última fase de desarrollo del capital monopolista -según la propuesta educativa de Lenin-.

Una confusión sobre el imperialismo, es la falta de claridad en la relación política concreta de la hegemonía monopolista, que es presentada por los aparatos de reproducción ideológica burgueses, como algo abstracto, ese es el éxito de su lógica, entendiendo a la lógica como instrumento de la ciencia -plantea Aristóteles-, al esconderse la destrucción implícita del “sistema democrático capitalista”, encubriendo así su abuso de poder estatal central, de apariencia cooperativa.

Porque realmente tal sistema democrático capitalista, lo que ha logrado durante todo un siglo de existencia es: la falta de claridad de la vida pública entre obreros, en el trabajo agrario y con la pequeña burguesía o clase media; impuesta tal dispersión de la población civil, con el proceso educativo hegemónico globalizador burgués, así también a través de la fragmentación de los partidos políticos, sus divisiones y sus fracturas; parecido se hace con los sindicatos de cooperación con el gobierno y la federación, y en el contexto internacional la fragmentación de “América y los Estados Unidos”.

Este último país afortunadamente está dejando de ser la primera potencia mundial en la nueva geopolítica con mayor población, más demandas y pocos recursos, por lo que se espera que habrá mucha creatividad en el tránsito del Estado soberano, en donde las nuevas generaciones podrían romper las barreras geográficas universales por medio de redes de comunicación dialógica multinacional, en donde los nuevos lenguajes con sabiduría de lucha indígena abren horizontes de luz, dentro de la marginación y la miseria para los nuevos derechos humanos en las regiones de identidad política clasista.

En la relación política del pueblo organizado se necesita una sensibilidad de clase, con un sustento virtuoso de filosofía indígena y de los saberes diversos de la gente de trabajo, para enfrentar el proyecto de la burguesía neo-liberal, pues ésta limita la autonomía política del sujeto educativo organizado, en sus múltiples dimensiones de identidad humana, que tienen en esta significación diferentes matices del proceso de humanización, en donde se capta la dimensión consciente o no sobre el saber del ser práctico.

Se necesita en el trabajo educativo de masas, ir afirmando la expresión humana sensiblemente crítica, justo entre la sobrevivencia, carencia y abuso de poder político, entre el amo y el esclavo, como parámetros de necesidad humanizada.

Pues hoy es evidente la la lamentable información que irá extendiéndose en las verdaderas luchas revolucionarias, ya que en México "Aún los que han podido conservar su empleo tienen ingresos que no les alcanza ni siquiera para lo más indispensable. En un reporte de investigación, de enero de 2010, el Centro de Análisis Multidisciplinario de la Facultad de Economía de la UNAM sostiene que 17 millones 776 mil personas, que reciben menos de dos salarios mínimos y representan el 41 por ciento de la población económicamente activa, perciben ingresos que no les permiten adquirir una canasta alimentaria recomendable, considerando aspectos nutritivos, culturales y económicos."

Por eso la proclama común que se levanta en la palabra dialógica es: !la tierra es para quien la trabaja!, !la fábrica es para quien la trabaja!, !la mina es para quien la trabaja¡, !la escuela es para quien la trabaja!, !la playa es para quien la trabaja!, !el hospital es para quien lo trabaja!, !la vivienda, el alimento y el vestido es para quien los trabaja!, !la cultura milenaria es para quien la trabaja!

!La organización política popular es de todos!