Thursday, August 27, 2020

La asombrosa corrupción neoliberal en México: Ejemplo de sensibilidadracional.

 

La asombrosa corrupción neoliberal en México.

Carlos Figueroa Ibarra.

 

He leído la denuncia de hechos presentada por Emilio Lozoya Austin a la Fiscalía General de la Republica de México (FGR) con respecto a los hechos de corrupción en los que se vio involucrado. Como se sabe, el ex Director General de Pemex fue capturado en España en febrero y llegó a un acuerdo con la FGR llamado “criterio de oportunidad” que no es más que ser testigo protegido. En su calidad de tal, Lozoya ha rendido esta declaración con la cual se inicia un proceso judicial histórico que involucrará a los más altos exponentes del establishment neoliberal mexicano. Leer el documento de 63 páginas corrobora lo que ya sabíamos pero que ahora conocemos a través de un testigo y protagonista directo. El testimonio involucra a los expresidentes Carlos Salinas de Gortari, Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto, a diputados y senadores del PAN y del PRI y muy particularmente a Luis Videgaray Caso, ex secretario de Hacienda y de Relaciones Exteriores del propio Peña Nieto. Videgaray aparece en el testimonio como el cerebro operativo de todas las corruptas transacciones denunciadas.

 

Tres son los aspectos esenciales de la corrupción delatada por Lozoya: 1) Los sobornos de Odebrecht a Peña Nieto desde que era gobernador del estado de México y posteriormente como candidato presidencial y aun siendo presidente del país. Ese dinero fue usado para pagar consultores electorales y otros gastos de la campaña. 2) El uso del dinero de Odebrecht para sobornar a senadores y diputados priístas y panistas para que aprobaran en la cámara de senadores y en la de diputados, la llamada reforma energética que privatizó el petróleo. 3) La fraudulenta compra por parte del gobierno en 275 millones de dólares de una planta de fertilizantes que ya era chatarra a una empresa privada (Altos Hornos de México) y que a lo sumo valía 70 millones. La compensación a Odebrecht por las decenas o centenas de millones de dólares que entregó a Peña Nieto y sus operadores sería que la referida empresa recibiría un trato privilegiado en las concesiones petroleras derivadas de la privatización del petróleo.

 

Salinas de Gortari aparece en la narrativa de Lozoya como un cabildero del PAN que contribuyó a conseguir la voluntad de legisladores panistas a favor de la privatización del petróleo a cambio de beneficios económicos a empresas vinculadas a su hijo Juan Cristóbal. Ligados a los sobornos están los actuales gobernadores de Querétaro y Tamaulipas y Ricardo Anaya (el candidato presidencial panista que enfrentó a AMLO en 2018). El expresidente Felipe Calderón y José Antonio Meade, el rival priísta de Andrés Manuel también en 2018, aparecen involucrados en un leonino contrato de suministro de etano con 25% de descuento con Braskem (filial de Odebrecht). Como consecuencia de las declaraciones de Lozoya unas 70 personas serán investigadas.

 

Crece el clamor por llamar a juicio a los cinco expresidentes neoliberales (1988-2018). López Obrador ha dicho que se hará si ello se decide en una consulta popular. Para allí vamos en este momento. Indudablemente, vivimos tiempos interesantes.

Saturday, August 1, 2020

LA IDEOLOGÍA y la lucha de clases, desde una mirada de la sensibilidadracional humanitaria.

LA  IDEOLOGÍA y la lucha de clases, desde una mirada de la sensibilidadracional humanitaria.

 “Más pagamos, más debemos y menos tenemos”.

                                                                                   Eduardo Galeano.

Sandra Cantoral.

 

“En la ‘ideología’... la teatralidad no es solamente

 una  determinada forma de actividad artística, que se

                                                             expresa técnicamente en el teatro propiamente dicho.

                                                            La teatralidad está en la vida misma, es una actitud

                                                             propia del hombre, en cuanto el hombre tiende a

                                                             creerse y hacerse creer diferente de lo que es”

                                                          
                                                                  Antonio Gramsci

 


Al respecto sobre la ideología en la lucha de clases, le tocó a Lenin[1] expresar desde una concepción filosófico-política-activa, del socialismo científico que:

Las clases sociales son grandes grupos de hombres que se diferencian unos de otros:
1) por el lugar que ocupan en un sistema de producción social históricamente determinado.
2) por las relaciones en que se encuentran con respecto a los medios de producción (relaciones que, en gran parte, son establecidas y fijadas por leyes entre propietarios y desposeídos). <…>
 3) en el auto-reconocimiento de la identidad de clase en movimiento, organización y lucha social desde la formación del sujeto histórico, es decir, de acuerdo con el grado de consciencia histórico-social asumida en el proceso educativo de la lucha de clases... -en la sociedad como una forma de vida cotidiana- <…que  lo unifica como proletario en la soberanía del pueblo, o no…>.
 <…> 4) por el papel que juega en la organización social del trabajo y, consiguientemente.
 5) por el modo y la proporción en que obtienen la parte de riqueza social de que disponen (renta de la tierra;  ganancia comercial; ganancia industrial; ganancia por el interés usurero financiero, <…ganancia por el narcotráfico y la venta de armas hoy en día…>; o como asalariado).
Las clases son grupos humanos, uno de los cuales puede apropiarse del trabajo del otro en virtud de los diferentes lugares que uno y otro ocupen en una estructura determinada de la economía social” Por supuesto, en un contexto ideológico determinado, históricamente.

Para conocer esta caracterización del sujeto educativo en formación según su extracción de clase social y sus dificultades de subjetivación-objetivación ideológica, es necesario reflexionar sobre una SENSIBILIDADRACIONAL -así escrito- en el sujeto histórico. Desde una amplia tipología y matices socioculturales, es importante ser conscientes  de la inteligencia social: a) en el sentido del arte, no como técnica vendible, sino  como consciencia crítica/autocrítica de la totalidad histórica emancipadora, potenciadora e innovadora, vivida en la formación estética o grotesca y b) en la educación como proceso de humanización, como forma de vida cotidiana, fundada en valores  para la actividad creativa, lúdica y autocritica en torno al amor a esta vida, con una verdadera transformación liberadora/responsable, o no, del ser humano en su proceso y equilibrio de vida-muerte ampliado. 

Porque la inteligencia social en la formación desde la infancia tendría que atender a una gran tipología de las inteligencias emocionales para distinguir las necesidades humanas de cada pequeñx y, así reafirmar su amor a sí mismx en el terreno de sus sentimientos, pudiendo potenciarse como sujeto en una racionalidad justa, segura e integral; de ahí la necesidad de reflexionar sobre la sensibilidadracional sin hacer una fragmentación del sujeto, como sujeto histórico integral, debido a la ignorancia, los prejuicios, el sin sentido o la destrucción humanitaria, dada la malsana CODICIA en el arrebato histórico de unxs sobre otrxs, hasta liquidar al otrx en su identidad cultural ahí constituida, es decir sobre la respuesta de ¿quién soy yo?, entiéndase, nosotrxs en la sociedad política conforme a la lucha de clases, al ser en sí la sociedad el escenario de la lucha social, en este entramado sobre la categoría de sensibilidadracional, es vital ser conscientes de ello.

En este Blog de Educación Política y Lucha de Clases, se trata de orientar, algunos rasgos metodológicos para la reeducación política sensible que incida en Otra concepción del mundo en formación/construcción de una nueva  consecuencia histórica, que sea potenciadora del sujeto educativo para  el presente siglo que inicia, lleno de inestabilidad, calentamiento global y caos, lo que nos compromete cada día más: ¿Qué hacer? Preguntaba Lenin.

Así hoy, nuevamente vemos, cómo la denuncia de la indignación se está desplegando globalmente, en ello, nos falta presenciar la Unidad revolucionaria proletaria/La Prole en ciernes, en este nuevo proceso de humanización o educativo para vivir satisfechxs como sujetos NO FRAGMENTADOS por el consumismo enajenado/cosificado de las mercancías por doquier, que simboliza  tantos vacíos, traumas y miedos, dada la violencia y la destrucción histórica y, que hoy se ha vuelto casi tradición y costumbre en las formas de producción cotidianas, pues al parecer, si lo reflexionamos y transformamos en formas distintas de vida integral humanitaria, así puede resurgir nuevamente la felicidad ganada con el esfuerzo del trabajo comunitario, sin purezas ni garanías obvio, sino como una esperanza echada al aire a través de los avances más profundos creados a lo largo del desarrollo y despertar de la humanidad en su deseo, pensemos, como otra utopía y/o construcción histórico-social alcanzable.
En donde,

“…el comunismo, como superación positiva de la propiedad privada en cuanto auto-enajenación humana y, como real apropiación de la esencia humana por y para el hombre; por tanto, como el retorno total, consciente y logrado dentro de toda la riqueza del desarrollo anterior, del hombre para sí como un hombre social, es decir humano”.  (Sánchez Vázquez Adolfo, 1975/2020: 42).

Para iniciar esta nueva temática sobre la categoría de SENSIBILIDADRACIONAL humanitaria, tendremos que dejar claras algunas explicaciones previas, en donde ya no pueda existir la CONFUNSIÓN sobre la “razón juiciosa sin sensibilidad matizada, ni tampoco la sensibilidad sin racionalidad aguda, son INESCINDIBLES, no puede haber fragmentación en los actos del sujeto histórico, desde un proceso de formación humanitaria integral; se parte de la concepción humanista de los grandes teóricos, hoy clásicos: Los presocráticos, Platón/Sócrates, Marx, Engels, Lenin, Fromm/Escuela de Frankfurt, Gramsci, Freire entre muchxs más que inciden en esta utopía del amor a la vida.

Iniciamos a conceptuar el sentido del AUTORRECONOCIMIENTO y la IDENTIDAD del sujeto-consciente;  el caso es PODER ir reflexionando en el despliegue del SUJETO HISTÓRICO y/o educativo, ¿Cómo y para qué transformarnos como humanidad?, sólo es tomar en cuenta sus distintas dimensiones en el devenir humano, veamos su despliegue: 1. Como persona con una máscara pero con un proyecto de vida que no distinguimos en un primer momento, hasta que dialogamos; como 2. Individuo con derechos ciudadanos; como 3. Familia o grupo social; como 4. Pueblo; como 5. Nación; como 6. Estado gobierno; como 7. Clase social y finalmente como 8. SER HUMANO, bien constituido, si se construye socialmente un porvenir de formación político-cultural y económico-comunitario para este siglo XXI en la construcción social del bienestar conciliador en ese entreverar figuras de pensamiento e interpretación significativa bien NORMADAS local e internacionalmente; ya que hoy se vive/sobrevive como se piensa, cada vez de forma más PÚBLICA, en esta última oportunidad para rectificar y restaurar el camino de destrucción capitalista, ejercido por el capital financiero actualmente; por eso es importante saber que:

La forma de vida en que se reconoce la persona a sí misma en torno a: 1. Lo que es, para saberse autocriticar de manera nosótrica y, 2. Lo que dicen que es y 3. Lo que cree cada unx, que es; en el entreverar de estas figuras de pensamiento, resulta el hecho, todo un proceso que  sucede  sólo a través de reconocerse con los otrxs de su comunidad; así es como conoce SU SER EN SÍ existencial, así como su propia negación transformadora y su otredad nosótrica, como un YO en TI mismo y así ser NOSOTROS PARA SÍ humanamente emancipados desde la lógica de opresión enajenante y manipuladora, que ha sometido a las poblaciones a lo largo de la historia; ENTIÉNDASE para NO continuar explotando sus capacidades al servicio de UNOS cuantos abusadores en el USO de la economía política y sociocultural.

Los magnates del capital, se encuentran envueltos en sus mesquinos intereses individualistas; esta expresión humana/inhumana hoy se encuentra en su límite, dada la violencia destructiva y el calentamiento global provocado en la irracionalidadinsensibilidad más absurda, lo cual es  público globalmente en la política neoliberal/privatizadora capitalista y que NO se hace responsable, sobre todo lo vemos hoy en tiempos de la pandemia, cómo a través de un largo recorrido de trabajo histórico no reconocido, es decir, no agradecido, el sujeto histórico, como gente de trabajo ES BORRADA DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD; reflexionar este contexto/texto/pretexto consiste en preguntarnos:  ¿cómo se identifica cada sujeto histórico?, lo cual tendría que ser discutido en la familia, la iglesia, las escuelas, los medios de comunicación de masas -Covarrubias Villa-, así como en la calle/mundo.

Hablamos del sujeto histórico, porque está sujeto o sujetado a sus afectos y razones más amorosas -a su memoria de esfuerzos compartidos en el acto cotidiano de justicia y de emancipación-); así vemos el contexto de la modernidad, entendida ésta como realidad concreta desde la cualidad de lo moderno en el modo de producción capitalista, es decir, de lo nuevo, que comprende a lo antiguo en el sentido de la lucha  de clases; así en el arte y la literatura el modernismo, muestra una afición por las cosas modernas, es decir, vemos a la modernidad como totalidad inescindible en su propia contradicción, diferencia/cambio y transformación en la sociedad, o escenario de la lucha de clases, encubierta con actos ideológicos.

Pero ¿Qué se puede cambiar? Porque las relaciones y diferencias de producción afectiva o no, corresponden a una época o historicidad de culturas civilizatorias determinadas a través de la producción, es decir, de ese contexto, texto y pretexto que circunscribe al sujeto histórico en tiempo y espacio; pues la persona está contextuada en una temporalidad constituyente  de  su existencia, que es así, en sí  en su propio cuerpo o temporalidad global, diferenciada en su ser particular;  esta  persona se identifica de alguna manera desde su pertenencia de clase CONSCIENTE O NO, por medio de sus representaciones sociales y por su participación político-pedagógica de integraciòn social.

La integración social, sucede en un largo proceso, a través del trabajo social e individual objetivado bajo formas prácticas en rituales humanitarios, y a través de objetos cotidianos y no cotidianos construidos/creados: artísticos, religiosos, de sentido común o científicos -siendo el conocimiento teórico-científico, según el Dr. Covarrubias Villa, el que puede explicar de mejor forma a los otros conocimientos en este sentido; cabe aclarar, que para Antonio Gramsci, cualquier acción que define al sujeto educativo, tendrá que tomar en cuenta tres momentos entrelazados para confiar en el EQUILIBRIO SOCIAL que se refiera a esta modernidad y lucha de clases: 1) La forma de producción histórico-social. 2) Los valores ético-morales acerca de esa producción. 3) Las tradiciones y costumbres ahí acuñadas, expresadas en su dialéctica inconmensurable hacia lo concreto creativo. Por eso Pérez Esquivel, refiere que ‘El hambre es la manifestación biológica de una enfermedad sociológica’ y Gramsci, precisa al respecto: ‘el hombre es el producto de sus actos’.

En este sentido sabemos que el sujeto RACIONALSENSIBLE, requiere del reconocimiento de sí mismo, para generar por medio de las formas interiorizadas de apropiación de lo real/simbólico/imaginario -Lacan- su propia personalidad de conocimiento, entreverada como un todo inescindible, transformándose a sí mismo en un sujeto de la historia, sin embargo, hoy en día el sujeto está absolutamente FRAGMENTADO; porque este movimiento del trabajo natural humanitario, es transformado y transformador, al transitar de un espacio filosófico y de folclor cultivado en las grandes civilizaciones -que son patrimonio de la humanidad-, que le dan sentido milenario al sujeto sobre el respeto y la responsabilidad de su propia historia, ello sucede de forma natural, pero su cultura ha sido lesionada y fragmentada con la modernidad mercantil; así está sujetado éste a sentimientos/resentimientos actitudes culturales confusas o falsas, igual está sujetado a su modo de producción correspondiente, determinado por las fuerzas productivas, es decir el CONOCIMIENTO SOCIAL ACUMULADO; aconteciendo así,  la organización y división social/internacional del trabajo, dentro de una lógica de producción material con un exceso COSIFICADO, de su propio contexto de contradicción entre clases, POSEEDORES y DESPOSEÍDOS de los medios de producción, empezando por la tierra, como principal medio de producción y, al poder determinar las formas de vida ELEGIDAS CON RESPONSABILIDAD, O NO, pues nadie define dónde quiere nacer.

Así el sujeto de la historia en sus creencias y certezas, va realizando en el trabajo histórico por todxs ralizado,  lo que se produce social o individualmente, y de ahí la tensión o contradicción de: 1. La propiedad privada de medios de producción en el contexto de la lucha de clases y 2. De la contradicción irresoluble entre el capital y el trabajo, en una larga y cruenta guerra ideológica; lo cual puede ser comprendido en lo más simple de lo cotidiano y particular del sujeto, desde el sentido común de la historia, a partir de los años de infancia, hasta abarcar la crítica al comportamiento imperialista del proceso de internacionalización del capital, haciendo la tarea educativa -explicándolo con bolitas y palitos a los niñxs desde una sensibilidadracional humanitaria-.

Ambos hechos en cuanto a la propiedad de medios de producción y la contradicción entre las clases sociales (forma clásica: burguesía y proletariado), están regidos por comportamientos análogos en la lucha por la sobrevivencia; en la lucha por la información de la política cotidiana dialógica; en la lucha por  el uso de la ciencia, del arte, de las humanidades y de la tecnología-cibernética-robótica; y por supuesto en la lucha por la autogestión desde distintas épocas de la modernidad hasta constituirse en COMUNIDAD soberana y autónoma, como la expresión sintética de la totalidad histórico-social en una interpelación directa entre el autorreconocimiento y la identidad del sujeto para esa comunidad, atravezadxs por la concepción dominante de la época, como podemos distinguir enseguida:

“…Se trata de un referente bibliográfico en los estudios de la internacionalización del capital y la instauración de la nueva división internacional del trabajo…, en un contexto de crisis mundial.
…Se inicia con dos valiosas apreciaciones respecto a la nueva división internacional del trabajo que muestran las contradicciones de la economía capitalista. La primera, sobre el creciente desempleo en los países tradicionalmente industrializados y el paralelo traslado de una proporción de la producción industrial a países en desarrollo. La segunda, establecida a partir de la relación entre: la descomposición de la producción, el uso intensivo de la tecnología, la reducción de costos de producción y la utilización de mano de obra abundante en los países en desarrollo” (P. 831) [2].
Lo importante en el reconocimiento de la persona humana por su trabajo social-individual-colectivo en la época de la modernización del mercado, sea o no consciente el sujeto de ese trabajo realizado, se puede ir ejerciendo desde una ética distinta y posible, no moralina de doble discurso; lo interesante para el sujeto histórico es conocer la forma de apropiación de la producción con un carácter de fundamento histórico para comprenderlo desde el sentido común, es decir, comprender cómo ha ocurrido, ya sea  de forma privada o colectiva con situaciones de explotación o no, en el contexto del mercado así construido socialmente, lo cual no quiere decir que ello haya sido decidido por la mayoría como parte de la sociedad política -AMLO- dado que, la responsabilidad vital para armonizar una condición humanitaria tendrá que tener calidad humanitaria o no lo es.

Tal conocimiento histórico del proceso de explotación, se forma y acuña en el cuerpo, como un hecho histórico cuantitativo y cualitativo, en donde el sujeto sea reconocido y nombrado por el otro que lo identifica como un “sujeto sujetado a una condición de clase o de vida humana/inhumana”; porque así, se está sujetado siempre a un juicio de valor ético-moral en los procesos de formación cultural humananizándose culturalmente con leyes acuñadas entre las comunidades, como historicidad genérica, que se diferencia a su vez por la historicidad en una multiplicidad de necesidades culturales, según  las diversas historias de vida particulares y universales concretas; ¿cómo sucede?, lo podemos apreciar cualitativa y cuantitativamente a través del proceso de transformación del trabajo ocioso, el trabajo creativo, el trabajo enajenado, el no trabajo, el desempleo o el trabajo colectivo; teniendo como parámetros la necesidad humana y el interés inculcados en la identidad de clase social; con base en ello, el sujeto tiene memoria histórica de sí mismo.

La identidad define lo que el sujeto cree y hace creer que es, en esa apropiación y distribución del trabajo social realizado por el sujeto, sí, sujetado históricamente a sus condiciones materiales de vida, porque desde ahí el sujeto constituido, se afirma y/o se niega  como tal, en momentos instantes concretos, efímeros y eternos en la consciencia humanitaria; a través de una topología del otro que lo mira y lo valora en la satisfacción de sus necesidades comunes, distribuidas y normadas en equidad o no, determinado esto, por el modo de producción ético-moral y el grado de conocimiento científico-social, porque la inteligencia social cobra este sentido de vida-muerte, como parte y contenido de la categoría de sensibilidadracional liberadora; teniendo presente que el poder capitalista hegemónico, o el poder humanitario, sólo tienen sentido cuando se convierten en una virtud cultural más, en el terreno de las emociones y sentimientos más profundos y agudos entre la reflexión y la acción de transformación humanitaria, sobre aquello que merece existir.

De manera que el sujeto histórico, pueda ir diseminando así su cuerpo en sentidos de humanidad/humildad o de vida concreta en intensidades/identidades de su autenticidad humana sustantiva; es decir no egoísta/nihilista, sino sólo al reconocerse en sus distintas dimensiones de la realidad histórico-social, con la que se identifica en esa constitución del ser integral conscientemente responsable del trabajo que cuesta amar la vida en el planeta tierra, como persona con un proyecto sea hombre, mujer o lo que elija; como grupo social; como individuo; como pueblo; como nación comunitaria, como mundo, o como clase social, capaz de organizarse políticamente/humanamente, a esto nos referimos cuando hablamos del DESPLIEGUE DEL SUJETO HISTÓRICO en su proceso educativo con sensibilidadracional, que entra en la comunidad como en un proceso de renacimiento y gratitud con las luchas compartidas.

El despliegue de los momentos humanitarios/inhumanos son distintos en los sujetos referidos dependiendo de su contexto sociocultural y político económico, dimensionados así de lo social a lo particular en el transcurso de su consciencia práctica activa, es decir, justo en su comportamiento ético-moral, que es donde se aprecia y se distingue lo bueno y lo malo, lo verdadero y lo falso, así como lo horrible de lo hermoso; ahí el sujeto histórico va asumiendo su derecho ético-moral sobre su independencia, soberanía, responsabilidad, respeto, cariño y autonomía como totalidad histórico social.

Al ser cada sujeto sólo síntesis acuñada y constituida de un espacio temporal más amplio universal y general; de manera que en el contexto de la lógica de la modernidad ilustrada el sujeto histórico, despliega desde su infancia, adolescencia y madurez su identidad, así inserta el sujeto  a la situación histórica de propiedad privada en la cultura  occidental y a la vez en su búsqueda de tal identidad matizada, para saber sobre sí mismo, así ese mundo real lo transforma y él socialmente también transforma a su época de pertenencia -mentalidad-; así vemos cómo se impuso hegemónicamente la ideología en la lucha social e individual, cual si fuese la única explicación y forma de vida, con una dimensión abstracta  y universal de la modernidad burguesa, legitimada por el imperio del capital sobre la inteligencia social aún sin gran equilibrio y fortaleza consciente en la correlación de fuerzas entre las clases sociales, quedando fragmentado el sujeto individualista y competitivo sin sensibilidadracional humanista.

                                                                        En una estrella, en un planeta,
                                                                        el mío, la Tierra, un principito
                                                                        necesitaba consuelo.
                                                                        Lo acuné en mis brazos y le dije:
                                                                        “La flor que amas no corre PELIGRO.
                                                                        Dibujaré un bozal para tu cordero
                                                                        y una ARMADURA para tu flor”.

                                                                                                Saint-Exupéry


De este modo la idea de  identidad fetichista, desarrollada en el periodo ilustrado o Iluminismo[3], enfrenta al sujeto de su época con las incoherencias de la insensibilidad humana ahí acuñadas -complejas y contradictorias-, que afirman o desconocen la sensibilidad del ser y que lo determinan en ese mundo de producción histórico-social; de manera que, el rumbo y el sentido como sujeto histórico con un proyecto hegemónico de clase o no se desarrolla a lo largo de su concepción del mundo y del amor a la vida, o no.

Esta confrontación de formas de vida entre propietarios y desposeídos de medios de producción para crear nuevos medios de producción a través de la explotación y la sobreganancia, significa la expresión más acabada de la contradicción entre salario, trabajo, capital y Estado, con sus diferencias irresolubles que entraña este modo de producción privadatizador/neoliberal, así se denomina su política, neoliberal, lo cual no acaba de comprenderse hasta hoy en día y, menos de superarse dicha forma generalizada de vida por el sujeto de la historia en esta lucha de clases que sigue rescatando de los escombros milenarios sin sensibilidadracional transformadora de un largo proceso educativo o de humanización que si bien es infinito, hoy se encuentra en su límite para PODER sobrevivir toda la humanidad.

Actualmente estas generaciones, estamos transitando de una concepción religiosa medieval, represora y reproductora de culpas y dinastías faraónicas, a otra caracterizada, por estar entreverados las formas de vida, en  una acentuada industrialización capitalista depredadora y contaminante del planeta tierra y de los sentimientos humanos más nobles, ya que se fundamenta en el individualismo  y  la lucha de clases que se perfila multiétnica, multicultural y de género -plantea Dieterich- como procesos de terror discriminatorio y de muerte pluricultural impulsadas las guerras por el imperio de las guerras/drogas del capital.

Pero la lucha social de ambiciones o justezas sociales,  también coexiste en la lucha social parlamentaria como posibilidad de emancipación humanitaria, luchando al lado de los más pobres o no, como en el caso mexicano, con AMLO por ejemplo, sabiendo que no existe presagio; y ello sucede en las formas más descarnadas y sublimadas de explotación del trabajo humano, tanto del enajenado como del creativo en la lógica de  propiedad privada occidental y de su necesario proceso de emancipación histórico-social, a través de un trabajo político-pedagógico internacionalista constituido en las consciencias sociales de sensibilidadracional sublimada y, que se asume en la toma de consciencia de los actos del sujeto, que exige la virtud humana como trascendencia histórica, ante la degradación cultural, ¿cómo?, pues en una mezcla ideológica y confusa de ello aún, ante la proclamación a la no violencia ejercida frente a aquellos que no pueden nombrar su expresión y su palabra como actos de hombres y mujeres verdaderxs en el desarrollo de sus capacidades auténticamente humanitarias de gran satisfacción comunitaria, ejemplos y caminos son muchos, lo importante es saber elegir en un momento concreto el más conveniente políticamente.

Cada vez queda más claro que, el proyecto comunitario es el futuro de la humanidad, en el sentido de mantener el proceso de transformación integralmente equitativo: “Si el trabajo es social porque la propiedad es privada” Marx. Desde el modo de producción y sus actitudes, se van reconociendo  las diferencias culturales del sujeto histórico:  la convivencia,  la participación política afectiva y solidaria, con respeto a las diferencias y al derecho a la información y al acceso a la tecnología, incluyendo la robótica y cibernética, en el despliegue histórico de humanización y no de degradación en la totalidad histórica enajenada, considerando su propia complejidad el proyecto comunitario, que sigue en construcción contradictoria, para ejercer un poder popular con sensibilidadracional que comprenda las necesidades comunitarias que han sido pisoteadas por el proceso civilizatorio colonizador y neocolonizador, dejando tal confusión entre el sujeto (consciencia) y el objeto (el mundo de la vida), para ser responsables de su porvenir.

En esa búsqueda por el reconocimiento civilizatorio impuesto en los actos de colonización represiva, están entremezclados los matices de la creatividad humana, mágica imaginativa, tecnológica, artística, robótica y científica;  constituidos estos entramados desde el sentido humano ontológico  a través del arte, la religión, la técnica, la literatura, el amor a la inteligencia social, al conocimiento y a los diversos saberes, así como en las interpretaciones más significativas del sentido cultural crítico dignificado en su auto reconocimiento, que históricamente  sólo se generó en una condición ideal y no con un sentido material colectivo concreto, en cada contexto que hable desde el sentido común, desde ese mundo que pueden comprender las mayorías, pero al ser aniquilada esta posibilidad en los procesos de coloniaje neoliberal privatizador, se ha engendrado históricamente la forma de producción imperial contemporánea explotadora del capital financiero corrupto en el planeta tierra, al no tomarse  en cuenta la satisfacción de las necesidades colectivas en equidad humanitara, siendo en sí, un crimen de lesa humanidad, aún no conscientizado ni aún nombrado como tal, ahí es donde entra la figura de sensibilidadracional propuesto en esta reflexiòn entre la ideología dominante y la lucha social.

¿Cómo poder construir una sensibilidadracional actualmente?, pensamos que a través del respeto y  la mutua correspondencia del conocimiento teórico-científico incluyente en los diversos contextos del sujeto histórico, como producción ya no individualizada/mercantilizada/privatizada, ya que no se concibe en la racionalidad hegemónica desde los modos de producción actuales,  el mal USO de sus distintos órdenes de conocimiento; por tanto no se concibe como una totalidad interdisciplinaria en los devenires de humanización y de socialización de conocimientos y de lo socialmente producido hasta este Siglo XXI en el escenario de la lucha de clases, según la consciencia política popular del sujeto histórico, como figura responsable del proceso educativo, o de humanización, que cuenta hoy con muy pocos años para librar este peligro de extinción de la humanidad y del planeta tierra.

Comprendamos y reflexionemos cómo aún no  se reconoce de forma PÚBLICA, local, nacional, intercontinental e internacionalmente, la búsqueda por el bien común humanitario, es decir para el cuidado de la vida y de los pueblos más desprotegidos, lo que requiere de un proceso continuo educativo de servicio humanitario digno y SOLIDARIO, para abolir el sometimiento y la degradación que impone la explotación  capitalista local, nacional e internacional y, que  encabeza como vanguardia destructora el mundo occidental; pues aún sigue sosteniendo en su discurso ideológico de la lucha social, matices metafísicos para encubrir y justificar su ambición y codicia, sobreviviendo con el encubrimiento del orden y la lógica establecida como modelo hegemónico económico/militar, pues ese es hoy su único poder inhumano, la muerte como alternativa de dominación; pero su velo ideológico se está cayendo en el mundo entero, hoy lo podemos corroborar con la gran caída del imperio más bélico, los Estados Unidos de Norteamérica.

Estemos pendientes de qué se cree que es cada sujeto histórico con sensibilidadracional o no, porque la presente generación es la más responsable del futuro de la humanidad, pues es la que más conoce de los acontecimientos de vida por toda la historia recorrida a través de las distintas épocas, que de alguna forma, están registradas. Y ya se sabe que, se cuenta con siete o diez años aproximadamente para parar el estallamiento del mundo si no se frena este desastre del calentamiento global  y de la injusticia social; es obvio que hemos llegado al límite

También somos testigos de la guerra entre China, hoy primera potencia comercial con la ruta de la seda y, los Estados Unidos que con la pandemia e intervencionismo militar mostraron su debilidad, a pesar de que creían ser, el gran imperio del mundo; por ello hoy toca a la sociedad política PARTICIPAR con sensibilidadracional humanitaria, reflexionando sus propias emociones para traducirse a sí mismxs en sociedad de otra forma con nuevos principios humanos y nuevas Constituciones políticas; ya que el sujeto histórico transforma su mundo y a la vez en ese acto, es transformada su consciencia histórica crítica y activa culturalmente, para incidir desde alguna trinchera de IDENTIDAD HUMANITARIA en esos procesos de emancipación social, pues ha llegado la hora, para enfrentar e incidir en la construcción de otra era, la del internacionalismo humanitario, en donde el principio sea la solidaridad y la dignidad como ejemplos educativos histórico-sociales de transformación CREATIVA HUMANITARIA, pues ya no se quiere más muerte, eso ya se conoce muy de cerca.




[1] Vid. Lenin. Una gran iniciativa, en Marx, Engels, Marxismo. Ed. Progreso, 2020. Moscú.  P. 479.

[2] Fröbel, Folker, Heinrich, Jurgüen y Kreye, Otto [1978-2020], “La nueva división internacional del trabajo. Sus orígenes, sus manifestaciones, sus consecuencias”, Comercio exterior, México, 28(7):831-836, julio. http://revistas.bancomext.gob.mx/rce/magazines/463/4/RCE6.pdf

[3] Por Ilustración se entiende a “la dirección filosófica definida por el empeño en extender la crítica y la guía de la razón a todos los campos de la experiencia humana. Kant ha escrito: ‘La Ilustración es la liberación del hombre de su culpable incapacidad. La incapacidad significa la imposibilidad de servirse de su inteligencia sin la guía de otro. Esta incapacidad es culpable porque su causa no reside en la falta de inteligencia sino de decisión y valor para servirse por sí mismo de ella... Ten el valor de servirte de tu propia razón: he aquí el lema de la Ilustración (Was ist Aufklärung?, en op. cit, de Cassirer, IV, P. 169; trad. Esp.: Filosofía de la Ilustración,  México, 1943-2020. F.C.E.,  Pp. 185-186. (Al respecto) (...Cassirer cita tres aspectos diferentes y conexos que comprende la Ilustración...) 1) la extensión de la crítica a toda creencia o conocimiento, sin excepción, 2) la realización de un conocimiento que, para abrirse a la crítica, incluya y organice los instrumentos para la propia corrección; 3) el uso efectivo, en todos los campos del conocimiento logrado, de esta manera, con la finalidad de mejorar la vida individual y asociada de los hombres. Estos tres aspectos, o mejor dicho tareas fundamentales, constituyen, en su conjunto, una de las formas recurrentes de entender y practicar la filosofía y, precisamente, la que ya encontró expresión en la edad clásica de la antigua Grecia. (...) Por Ilustración moderna se entiende comúnmente el periodo que va desde los últimos decenios del siglo XVII a los últimos decenios del siglo XVIII, y este periodo es, a menudo, indicado sin más como Ilustración, Siglo de las Luces o Iluminismo”. Abbagnano, Nicola. Diccionario de Filosofía.  Editorial Ariel,  Barcelona 1994-2020. Pp. 648-649. Hoy en pleno siglo XXI, reflexionemos cómo enfrentar Otra Ilustración Humanitaria con sensibilidadracional, en el LÍMITE de la humanidad, dada la destrucción del planeta y de las capacidades creativas y amorosas, para la mayoría de las poblaciones en el mundo; ello lo demanda el internacionalismo del sujeto histórico desde una responsabilidad consciente en ciernes. Pues como afirma Gramsci estamos en un terreno que no acaba de morir transitando a otro que no acaba de nacer.